CARASUEÑO

Jimmy J. Moore

[Coming Home]

(Entrada de mayo 2022) Jimmy J. Moore es un músico que ahonda en la americana y el country-rock de los 90 con honestidad y soltura. No conocía sus trabajos (grabó ya en 2018 su primer LP en Oakland tras un par de estancias en EEUU como profesor y músico a tiempo parcial) pero cuando me escribió para contarme que quería grabar conmigo me pareció estupendo tanto por sus influencias como por las fechas que se propusieron como por lo majo que es. Me gusta grabar a gente maja. Eso es importante. Jimmy tenía nueve canciones y el rollo que buscaba en Coming Home (y algunas otras) eran los Wilco de A.M., Tom Petty y el Tomorrow The Green Grass de The Jayhawks. Estuvo guay revisitar esos discos para enfocar la grabación.  

Lo primero que hicimos después de la producción, con esta y todas las demás canciones, fue grabar las acústicas. Usamos la Martin de Jimmy, la Guild del estudio, que tiene un color mucho más oscuro, y en algunas la Eko de 12 cuerdas. Todas se microfonearon con el Coles 4038 al traste 12, coincidente con una pareja de AKG C451E en XY, más un dinámico apuntando a la tapa. Creo que el dinámico era el AKG D224E. En mezcla ganaba más un micro u otro en función del número de acústicas de la canción y de la guitarra.

Isasa

[Océano]

(Entrada de agosto 2021) El cuarto disco de Isasa, de título homónimo, es una de las cosas que más he disfrutado desde que abrí el estudio en Zaragoza. Conrado es capaz de transmitir mucho con su guitarra acústica o con el Weissenborn, pero es capaz de hacerlo sin inundarte de notas, sin machacarte el cerebro con solos ni grandes muestras de virtuosísimo, y no es porque no pueda hacerlo, es porque prefiere un contexto más calmado y más cinemático para decir lo que tiene que decir. Nunca he hablado con él de esto, pero diría que Isasa valora tanto la nota como el silencio que va detrás, y eso hoy en día es una bendición. “Isasa” (La Castanya, 2021) contiene nueve piezas instrumentales alternando Weissenborn, acústica (una Guild DV52) y otro tipo de efectos, entre ellos unas voces sampleadas de Lorena Álvarez. Algunas pistas ambientales las grabó el propio Conrado en su casa de Madrid y durante su residencia en el Konvent de Cal Rosal (Barcelona), trayéndolas después al estudio para trabajar con ellas y mezclarlas con las pistas de guitarra y shruti box que grabamos aquí. Por si alguien está interesado, el shruti box lo grabamos con un Bumblebee RM-5 muy muy lejos, en el control del estudio. El cacharro expulsa una cantidad ingente de aire y llegaba a saturar el micro si lo acercaba demasiado. Lo podéis escuchar en las canciones “Faro” y “Teo”.

La canción que he seleccionado, no obstante, es “Océano”. ¿Por qué esta? Pues no lo sé, porque me encantan todas. Creo que el vídeo que hizo Marcel Juan me sorprendió tanto que ha de ser esta canción la que use como pretexto para hablaros de cómo grabé el disco. El vídeo, que podéis ver aquí, me enseñó la cantidad de ángulos desde los que cada oyente se puede acercar al universo de Isasa. Las imágenes que su música puede evocar son infinitas. “Amor” es otra pieza que me desmonta totalmente. Pero bueno, yendo a la parte técnica, todo el disco se grabó con cuatro micros cercanos y dos lejanos. Los micros de room fueron los 414, espaciados aunque no muy espaciados (un metro?), y para registrar la acústica más de cerca usé dos 451 en XY coincidentes con el U87 apuntando todos al hueco entre el soundhole y el traste 12, en combinación con un AKG D224 grabando la tapa de la guitarra, entre el puente y el final del cuerpo. En algunas guitarras puedes escuchar el punto en que la resonancia de la madera es más bonita y más concreta (focused?) o que bueno, de alguna manera encaja mejor con lo que quieres registrar, ahí suele ir bien un dinámico. Uno de los micros, además de grabarlo en seco, lo envié a la PCM70 para tener una señal de reverb que no fuese un plugin. En otras ocasiones (“Ausencia”) la reverb nos la dio la AKG BX-5. El Weissenborn lo grabé de una manera similar, aunque los 451 estaban a 45º del soundhole y el U87 más distante (60 cm?) apuntando al cuerpo, con el D224 apuntando al agujero. De mala memoria diría que los previos que usé fueron los CAPI y los AML para los micros cercanos, y los Sytek para los lejanos. No hubo compresión ni EQ de ningún tipo. Todo el LP se grabó y mezcló en cuatro días.

Espero que podáis sacar un rato suficientemente largo en algún momento para disfrutar de este disco en su totalidad y con la calma que merece.

Casi Reptil

[Música Clásica]

(Entrada de mayo 2021) Música Clásica es una de las canciones del EP que pude producir para Casi Reptil en el otoño de 2020, que finalmente llamaron “Todas las cosas grandes y pequeñas“ (Ta-Ta Boom!, 2021). Antes de hablar de la canción me gustaría explicar que Casi Reptil es uno de esos grupos en los que además de músicos hay verdaderos amigos, que se ayudan entre ellos, que se hablan, que comunican cosas y que se emocionan a la vez. Y en Música Clásica hay mucha emoción y muchos recuerdos, que intentamos transmitir con la producción, la elección de los acordes, sonidos y la propia mezcla.

Salvo uno de los sintes, casi todo se hizo con el Roland D550, que es la versión rack del Roland D50. El Roland D50 es conocido por ser uno de los sintes que Badalamenti usó para la BSO de Twin Peaks, y es un aparato que brilla en muchos aspectos, pero sobre todo a la hora de crear pads de voces y atmósferas.

La intro no recuerdo qué acordes tenía en un principio, pero los cambiamos por F/Bb y Dm7/G, que crean un ambiente más misterioso y se resuelven mejor con el F con el que arranca la estrofa. Toda esa intro es el D550 en dos tomas, con el mismo MIDI pero dos sonidos distintos que se superponen, uno por graves y otro por agudos. Después se une un preset del emulador del SEM de Arturia. Más o menos, entre estos tres sintes se van sucediendo las escenas de la canción, jugando con subidas y bajadas de volumen muy largas para que el oyente no las perciba.

La voz de Cristina la registré con el U87 y el RE15, pero en la mezcla usé más el RE15, que es un poquito más oscuro. Si mal no recuerdo usé dos AML 1073 y, como compresores, el Neumann U473a para el RE15, y el Purple MC77 y el LA3A en cascada para el U87, haciendo así diferentes tratamientos para cada micro. De todas formas, aquí la clave es que ella consiguió cantar de una manera muy sutil, muy contenida, y eso encajó muy bien con el propósito de la mezcla.

La canción se va desgranando muy poco a poco, y las transiciones tenían que ser muy tranquilas para no romper ese halo de misterio y melancolía. No podía haber grandes sorpresas ni sustos, así que los dos arreglos que entran a mitad y final de canción (guitarra y piano) están, como la voz, muy integrados en mezcla, tanto por volumen como por ataque y frecuencias. La guitarra la grabó Jesús, pero no recuerdo cuál usó, lo que sí recuerdo es que pasó por el EHX Pulsar, que iba al Bassman por un canal y al AC10 por el otro, con el envío al AC10 pasando por el Red Panda Particle. O eso creo.

Una cosa que me gusta mucho de la canción es cómo conseguimos unir en prácticamente el mismo plano los coros reales y el D550 en la parte que hay entre estrofas (hacia el 0:40 y el 2:00).

Con eso y la base, que tuve que hacer sin el grupo presente por cosas de la vida, ya estaba hecha la canción. Hay recuerdos que tienen que fotografiarse.

Podéis escuchar Música Clásica aquí, o ver el precioso vídeo que hizo Cristina Hidalgo en el link.

Lili

[Ne t'en va pas]

(Entrada de agosto 2020) Ne t’en va pas es una de las canciones contenidas en Labrune Vous Délivre, el primer disco de Lili, a su vez pseudónimo artístico de Aurélie H., artista francesa que reside en Bilbao. Aurélie contactó conmigo en 2019 para grabar su disco debut, pero hasta marzo de 2020 no pudimos materializarlo, tiempo en el que pudimos intercambiar música y hacernos una idea más clara de lo que buscaba. Antes de venir me envió montones de demos que había grabado por su cuenta con únicamente su guitarra de nylon, y entre los dos hicimos una pre-producción bastante express (todo el disco se grabó y mezcló en 8 días, si no recuerdo mal) ideando a grandes rasgos las nuevas sonoridades de cada canción. Grabamos todas las canciones empezando con una base de su voz más el nylon, después construimos todo encima de esos dos elementos, y más tarde quitamos/dejamos el nylon en función de la canción.

Para grabar el nylon usé un AKG D224E, dos AKG C451E con cápsula CK1, el U87 y dos 414 para tener un estéreo de la sala

Calavera

[Malas Hierbas]

(Entrada de mayo 2020) Calavera publicaron Malas Hierbas, adelanto de su próximo trabajo largo, en la primavera de 2020; pero las sesiones se remontan al otoño-invierno de 2019. Malas Hierbas es otro cañón de canción, el tipo de tema al que nos tienen acostumbrados: estrofas misteriosas, estribillos que estallan y cambios que te sorprenden. En mi caso es una canción particularmente especial porque es la primera en la que trabajé después de hacer Lar de Maravillas. Era, y es, mi estudio, pero por aquel entonces no lo conocía bien. No entendía todavía cómo sonaba cada sala, dónde registrar cada instrumento, distancias y alturas para los micros, cómo capturarían la sala, cómo sonaba el control y un largo etcétera de incógnitas que se han ido desvelando con el uso diario del estudio. En septiembre de 2019 comenzamos a trabajar en la estructura y arreglos de teclados con el Juno 106 de Ignacio, y en octubre ya estábamos grabando baterías en la salita con Alfonso Luna - que ya os sonará de la grabación de Alondra Bentley. Al final todo ha encajado, sonado y perdurado, pero para mí esta canción ha sido una combinación de dudas, aciertos, lecciones aprendidas y duro trabajo en equipo.

Malas Hierbas se sostiene y se hila con la acústica de Álex Ortega, que suena en prácticamente toda la canción. Pasamos por varias fases, decidiendo si usábamos una eléctrica con capas de distorsión, si no, si acústica… y al final la Guild D-4 era lo que más aire dejaba para las voces y el resto de arreglos. La grabé con dos 414 espaciados. Las eléctricas de Ignacio en la estrofa, que si no recuerdo mal grabó con su Jazzmaster, las enviamos a dos de los amplis del estudio: el primero de ellos (el Bassman) tenía la señal con todos los efectos excepto delay y reverb, y el segundo de ellos (el Princeton) tenía solo el wet del delay y la reverb. De esa manera en la mezcla podía separarlos independientemente y abrir el arreglo en el panorama. Las estrofas se van desgranando con esos elementos y varios teclados adicionales. El grupo quería usar, siempre que fuese posible, su Roland Juno 106. Así, luego, a la hora de hacer los directos, no será tan complicado encontrar los sonidos del disco y acondicionarlos para los conciertos. Para usar el Juno lo que hicimos fue lanzarle el MIDI desde ProTools y recoger el audio del Juno, a través de un Eventide H3000, saliendo en estéreo a dos DIs EMO y de ahí a los dos previos AML ez1073. A veces usamos un Red Panda Particle, pero en general la salida del Juno iba directa al Eventide a través del mezclador de sintes que tengo en el estudio. Hay varios sintes en la canción, desde sonidos brass a otros más ululantes jugando con un LFO que modula al DCO, pero el que a mi juicio destaca más es el del puente, antes del último estribillo. Andábamos un poco locos con el último de Metronomy y quisimos jugar un rato con algo más bailable que al final se quedó en la canción. Otra cosa que me parece interesante de esa parte es que el bajo se usa como elemento melódico. El bajo, en lugar de sostener la canción con el bombo, contesta con una melodía a la pregunta de los teclados y cierra el círculo dentro de cada vuelta del arreglo.

Señalada

[Jardín]

(Entrada de septiembre 2018) Señalada es Pedro Señalada de Neleonard y Gabriel y Vencerás. Ya tuve el placer de trabajar con él en su primer disco en solitario (“El Deshielo”, Hermanos Segundos, 2016) y cuando salió la oportunidad de hacer cosas en “Mejores Amigos”, su segundo LP, no me lo pensé dos veces.

“Mejores Amigos” contiene 8 canciones y ha sido co-editado por Discos de Kirlian y Hermanos Segundos. Ahora mismo el grupo está formado por Alba González (sintetizador), Alberto Cano (guitarra), Tito Andrés (bajo) y el propio Pedro a los mandos de la nave.

Junto a “Luz Blanca”, “Jardín” comparte el puesto de canción favorita. Es increíblemente sencilla en esencia, pero la melodía es tan bonita y la letra tan luminosa que podría funcionar con una guitarra y una voz. A veces pienso que Señalada le da una patada a una piedra y le sale una canción; quizá no sea así, pero todo fluye tan naturalmente en sus composiciones que siempre sospecho eso (con envidia).

“Jardín” está mezclada en ProTools, sin hardware externo. La intro es una eléctrica con las cosas habituales más un trémolo, pero además está enviada a dos buses. Uno es un eco paneado a la izquierda y el otro es un bus estéreo con un armonizador que se va realimentando a sí mismo. Eso produce la sensación de que el tono va creciendo en octavas pero de una manera casi infantil, como un personaje de dibujos animados. De ahí salimos ya a la primera estrofa acompañados por el ritmo del Casio SK1, un teclado de juguete que no obstante ha encontrado su hueco en montones de grabaciones (Sparklehorse, Blur…). Ese ese sonido de videojuego que continuará durante toda la canción. Está ahí, pero no molesta y te permite construir algo encima.

Entrando con la estrofa están también las eléctricas limpias paneadas y con diferentes chorus en cada canal. Eso es una constante en casi todo el disco. Pedro me dio sus guitarras grabadas por línea y en su día estuvimos hablando de Cleaners from Venus y Ariel Pink. Decidí limitar el número de cosas que deberíamos usar y, como a Pedro todo le parece bien, hicimos eso. Por ejemplo, casi todos los teclados del disco – salvo los de “Jardín” precisamente – están hechos con un Roland D-550.

Cuando termina la segunda estrofa entra una programación de un sinte que va con el bajo pero en otro registro frecuencial para no pisarse más de lo necesario, y entra también el arreglo de nylon. Pedro grabó multitud de arreglos en el disco, hechos con su guitarra clásica. También ese recurso aporta coherencia al conjunto. Al final los sonidos que escuchas a lo largo de las canciones llegan a ser conocidos y casi estableces una relación entre Roland-Nylon-Chorus como “el sonido”.

Volviendo a la canción, cuando termina la parte instrumental volvemos a la estrofa de nuevo, pero esta vez salimos con batería “normal” (el bombo está sacado de una CR78 y en el bus de caja hay un poquito de DX). Y ya cuando salimos a la siguiente vuelta tras las estrofas entra el teclado de Alba, que también está pasado por el armonizador pero de una manera más sutil. El arreglo me pareció perfecto y no cambié nada. Eso forma el grueso de la outro. A partir de ahí es poner la toalla, perderse en la rueda de acordes, el arreglo de teclado, la sal y el mar.

Jabier Muguruza

[Spam Kanta]

(Entrada de diciembre de 2017)  La grabación y mezcla de la nueva reencarnación de Jabier Muguruza surgieron de la amistad común con Miren Iza, con quien Jabier se puso en contacto tras escuchar “La Calma Chicha” (ver entradas anteriores). Estoy muy agradecido a Miren el haberme recomendado porque eso me ha permitido conocer (un poco) a Jabier tanto en lo personal como en lo profesional. Jabier es un artista de los pies a la cabeza, una estupenda persona, y he aprendido mucho trabajando a su lado. Como buen profesional, Jabier sabe rodearse de buenos profesionales, y en esta ocasión contó con las guitarras de Ander Mujika, las voces de Mireia Otzerinjauregi y de la propia Miren Iza, y el saber hacer de Íñigo Irazoki, quien grabó parte del disco en su estudio Atala (Bera, Euskadi). A mí me tocó grabar en mi estudio de Zaragoza las bases rítmicas y los sintetizadores analógicos, y después hacer la mezcla de todo el disco. Aun así, “Leiho bat zabalik” (Mara Mara, 2017), entre unas cosas y otras, se grabó y mezcló en tiempo récord.

He escogido “Spam Kanta” para hacer esta entrada pero podría haber elegido cualquier otra. El disco guarda mucha coherencia tanto en lo artístico como en lo técnico, así que habría dado igual. En “Spam Kanta” lo que abre la canción es la voz de Jabier y una eléctrica limpia de Ander. Las voces de Jabier las traté siempre igual en todo el disco, con un poquito de recorte en Pro Tools y de ahí al Neumann U473a, al Neumann PEa con unos medios generosos, y también añadí un mínimo del Warm Audio EQP-WA para redondear. Las voces siempre las envié a la Lexicon PCM70 y una vez allí jugué con los presets y los tiempos de decay que mejor iban para cada canción. Las voces de Mireia sí las fui tratando de maneras diferentes en función de lo que pedía cada canción. En “Spam Kanta” escogí solo una de las pistas (Íñigo me pasó varias para cada canción, con diferentes micros) y después de limpiarla y comprimirla la doblé y abrí con el Eventide H3000, quizá el cacharro que más he usado en este disco. En el 1:30 entra una parte que me encanta, es un solo extraño de Ander, muy distorsionado, disonante y lento, hecho en tres overdubs, y va acompañado del Roland JX3P arpegiado a toda velocidad y con uno de mis presets favoritos del Quadraverb (no desvelo cuál, aunque – pista – es el favorito de Nick McCabe también). Me gusta porque aquí, en principio, guitarra y sinte son cosas que no deberían encajar bien juntas y sin embargo lo hacen. En la siguiente estrofa entran elementos nuevos que refrescan la canción: un Wurlitzer tocado por el propio Ander, un grave que empaca por abajo y un Omnichord que metí con algún delay que no recuerdo. El Omnichord está desafinado con respecto a todo lo demás, pero no hasta el punto de resultar desagradable, sino más bien interesante/intrigante, y además así no choca con las bajadas (chulísimas) que hace Ander con la eléctrica y que abrí, de nuevo, con el H3000. Las bases mezclan batería acústica y samples muy tratados de varias cajas clásicas: CR78, 707, 909 y también la muy marciana Maestro Rhythm King. El final extraño es en realidad una pista de acompañamiento grave del Omnichord puesta al revés, y el JX3P arpegiado.

La mezcla final la ruteé al sumador analógico, de ahí a los CAPI VP28 y de ahí al buss comp de Radioman, pero más que nada para dar un color extra. Javier Roldón se ocupó de la masterización. 
 
Podéis escuchar “Leiho bat zabalik” aquí y leer sus letras aquí.

Marem Ladson

[All My Storms]

(Entrada de junio de 2017)  Me encanta trastear con cajas de ritmos, efectos marcianos y sintetizadores, pero no negaré que de vez en cuando volver a trabajar en un proyecto más clásico (aunque contemporáneo) te permite disfrutar a tope. Si la canción es buena y la voz es buena, tienes la mitad hecha. Y eso es lo que pasa con All My Storms, la primera canción de Marem Ladson en Mont Ventoux. Sin trampa ni cartón, ni más chistera electrónica que el MS20 hacia el final de la pieza y unos samples de LinnDrum apoyando a la caja “de verdad”, aquí tenemos un tema que se sostiene solo. La canción es de la propia Marem y en su día apenas hicimos cambios, tan solo una salida de la tonalidad en la estrofa, el parón previo al segundo estribillo y el cambio a F / Dm7 / F / D7 en la parte de “Make you love me”. La melodía de la voz era muy buena, todo funcionaba y era cuestión de vestir la canción, más que de darle la vuelta.

Para la pista de guitarra usé la SG saliendo por un lado a un pequeño VOX AC4 y por otro al Fender Princeton con un Fuzzface. Creo que el primero lo grabé con un M201N y el segundo con un 545, ambos setenteros. Los amplis estaban en mi salón. Toqué cuatro tomas y después me quedé con lo mejor de cada una en ProTools para formar la que suena en la canción. El bajo lo grabé por línea con el Precision al UA 610, y el rhodes con una librería (pero no recuerdo cuál!). Programé un ritmo en Reason y con eso grabamos la voz de Marem. Marem tiene un talento innato para cantar. Básicamente hay gente a la que no le queda otra que cantar en su grupo, otra a la que le gusta cantar, y otra que, simplemente, canta. Marem es de las últimas. Lo tiene. Grabó la canción sin despeinarse, de nuevo en el salón, y con una combinación del U87 y el Bumblebee. El Bumblebee es un micro de cinta que te montas tú mismo, como si de un mueble de IKEA se tratara, y es muy guay para sacar voces más oscuras. En realidad vale tres duros, y el otro bastante más, y sin embargo en la mezcla final el Bumblebee está a tope y el U87 está unos 12 dB por debajo.

Llegados a este punto hicimos el arreglo de cuerdas y metales y contactamos con Xema de estudios Río Bravo (Valencia), quien grabó estupendamente la batería y las trompetas de Pepe Andreu. En cuanto nos pasaron sus pistas la canción estaba lista para ser mezclada.

Para la mezcla de All My Storms intenté conscientemente usar lo mínimo en ProTools y lo máximo en hardware. La voz pasa por el U473A, que es la bomba, y después por una de las EQs PEa de Neumann. Las cuerdas pasaron por el F600, que siempre me ayuda a calentar cosas digitales, y el bajo pasó por el Universal Audio LA-4 y otra de las PEa. El bombo lo procesé aparte, lo limpié en ProTools y lo redondeé con uno de los dbx 160x, y el resto del bus de batería pasó por el Classic Compressor de LA Audio y por las EQs Filtek. A la caja le faltaba algo de peso, así que eché mano de unos samples de la LinnDrum, que están sutilmente sonando por debajo del sonido original de caja acústica. Toda la mezcla pasa por el sumador pasivo y de ahí a los CAPI VP28. Una vez más, la canción la masterizó Javi de Vacuum Mastering.

Nine Stories

[Friends We Lost On The Way]

(Entrada de mayo de 2017) Cuando Nacho mandó más de 30 (¡!) canciones para que hiciésemos una selección de las que podrían ir en su nuevo disco, Friends We Lost On The Way no fue una de las que seleccioné yo. En su versión demo, aunque me gustaba, pensé que no llegaba al corte al que sí llegaban ampliamente otras. Me alegro de que al final, en el cómputo de las votaciones (el proceso fue muy democrático y abierto, y es algo que continuó durante toda la producción del LP) Friends sí saliera como una de las elegidas. Ahora es una de mis favoritas y creo que es un acierto como adelanto de Cinéma Vérité, su próximo disco largo. ¡La única pena es que no aparezca en el LP! Aunque ese es el motivo ideal para comprar el 7”.

Llegado el momento de plantear sonidos y referencias quedamos con Nacho en que, si hacíamos Friends, tenía que ser un cañón sin medias tintas ni miedos. A veces parece que en ciertos grupos españoles haya miedo de hacer una canción deliberadamente dance o deliberadamente seria o deliberadamente divertida; en definitiva deliberadamente fuera de los cánones de ese grupo, y eso es algo que hemos querido romper en este disco. Friends es un claro ejemplo. Si hay que bailar, que baile todo el mundo.

Cuando nos pusimos a ello, hablamos de New Order, de Pet Shop Boys, de los 80, de Pulp y también de la faceta más pop de The Cure (de quienes trinqué el arreglo de guitarra/mellotron, seamos sinceros). La canción gira en torno a la melodía de voz del estribillo, que se va usando como recurso en otros momentos de la canción pero a través de unas cuerdas con phaser, y en cómo esa guitarra/mellotron sirve de contrapunto a la melodía de voz de las estrofas. Hay mil cosas en la canción, pero realmente el meollo es en sí muy sencillo.

En la canción hay varios bajos. Uno, en la estrofa, es el Precision que tocó Nacho, y el otro es un Moog que se une al Precision pero solo durante los estribillos. En el cambio hay un tercero, que está secuenciado con Reason. Es quizá el instrumento que más dinámica da a la canción, lo cual en una canción tan dance es hasta curioso. El otro “instrumento” que deja claro cuándo estamos en el estribillo y cuándo salimos de él es la voz de Alondra Bentley a través del Dolby y de un Auto-Tune al 101%.  Fue una inclusión de última hora, y recuerdo bien que esa parte fue muy divertida de grabar. Alondra apuntó en un papel cada sílaba y las fue grabando una a una por separado, para después montarlas en el estéreo de la canción. ¡Estuvimos un buen rato!

Otros elementos un poco más exóticos que usamos fueron el Yamaha PS-3 en la intro y el Sherman Filterbank tanto en la base rítmica como en otro arreglo de teclado que también secuencié en Reason. Todos esos soniditos percusivos que parecen sacados de los Autos Locos son el Sherman, automatizándolo para que aparezca y desaparezca. Nacho cantó el tema muy relajado, creo que en un 441 + el Great River, y después calentamos la interpretación con el Decapitator. Hicimos varias pruebas y vimos que así nos acercábamos más al mundo vocal de Bernard Summer. Ahora pongan su giradiscos a 45 revoluciones y suban el volumen, o hagan click en este enlace : )

Calavera

[Esqueleto]

(Entrada de abril de 2017) El disco de debut de Calavera, Exposición (Mont Ventoux, 2017), ha costado tanto tiempo y esfuerzo que es difícil hablar de él sin que esos factores intervengan de alguna manera. Por otro lado, todo el aprendizaje, el resultado final y la acogida que está teniendo son cosas que te llenan de alegría y satisfacción. La producción de Exposición se comenzó en la primavera de 2016 y las últimas mezclas se terminaron a primeros de 2017. Las baterías y algunos bajos se grabaron en los estudios de Hans Kruger en Subiza (Montreal Studios), y el resto de cosas en mis estudios de Madrid y Zaragoza, con una mudanza de por medio. No sabría con qué canción quedarme, porque todas ellas me traen infinidad de buenos recuerdos, pero he escogido Esqueleto porque eché una mano en su composición y me gusta particularmente el sonido de la batería, la apertura de la canción y – lo más importante siempre – la melodía de la voz.

Esqueleto tiene dos partes muy claras. En la primera, el grueso del sonido de la batería proviene del bombo y de un aéreo mono que colocamos por encima de la cabeza de Iván, apuntando a la caja. Era un micro inspirado en el U47, construido por Alberto de Nessie Audio. Hay también otros elementos, pero esos dos son los más fundamentales. En mezcla, el bus de batería de todo el disco - salvo el bombo - pasó por el LA Audio Classic Compressor y por las Neumann W492. Volviendo a la canción, relativamente la voz tiene poca reverb (en una primera mezcla tenía incluso menos) y todo el dibujo sucede en torno a un arpegio que Álex grabó con su Critter & Guitari Septavox. Hay otros elementos jugando el partido, pero siempre entran y salen, no se quedan. Todo eso ayuda a que la canción tenga más aire y la batería más potencia. En el pre-estribillo se vacía la mezcla y la voz se cambia por una toma deliberadamente autotuneada, para luego poder entrar todos con más autoridad en el estribillo, donde se unen una serie de arreglos de metales cortesía de Sac, que pasé en mezcla por el F600, y las contestaciones de Ignacio, que hicimos con su Polysix y unos mellotrones. En principio, la canción no tenía una línea de bajo, pero me parecía que los estribillos carecían de peso sin una, así que grabé la que suena con un sintetizador (no recuerdo cuál, pero es el mismo que usamos para el grave de “Museo”, otro de los temas del LP). A grandes rasgos la parte uno funciona de ese modo, mientras que en la parte dos el cambio fundamental se produce en la batería: además del patrón, que no tiene nada que ver con el de la parte anterior, el U47 desaparece y sacamos el grueso del sonido con el XY (dos Coles 4038); a su vez, el bus de la batería lo fuimos distorsionando más y más con un Decapitator automatizado. Los arreglos en la línea de OMD son de Ignacio y los grabamos con el Waldorf Streichfett, para después filtrar un delay que envié a uno de los lados del panorama. Álex añadió varias improvisaciones vocales y Sac metió más capas de metales. Con eso y el final abrupto, la canción estaba hecha. Todas las mezclas del disco se pasaron por el sumador Folcrom, levantándolo después con los previos Drake, que siempre ayudan en medios-graves. Como último paso se aplicó un pelín de compresión de bus y ya lo dejamos todo en manos de Javi Vacuum para que hiciera el máster. 

Señalada

[Las Cosas Simples]

(Entrada de abril de 2017) El Deshielo, primer disco de Pedro Señalada, es una de esas cosas que suceden muy de vez en cuando y que te obligan a seguir creyendo en esta cosa loca llamada pop. Pedro es el batería de Neleonard y de Gabriel y Vencerás, y como buen batería, esconde algún que otro sorprendente secreto. En su caso se trata de tener una facilidad pasmosa para hacer canciones de pop surrealista en la mejor línea de Mac DeMarco, Faris Nourallah y Sergio Algora. Su voz, además, es sosegada y melódica; y sus letras, algunas de las mejores que se hacen por aquí. Señalada grabó su disco de debut en HiJau USB? y en casas de amigos, y mi misión fue añadir teclados, programaciones y ritmos, y mezclar todo el conjunto. Me lo pasé pipa. De todo el LP he escogido “Las Cosas Simples” pero podría haber seleccionado cualquier otra, porque cada una es un particular universo enano de momentos, detalles y preciosismo lo-fi, y todas ellas te atrapan. En “Las Cosas Simples” tenía a mi disposición una guitarra de nylon, el bajo de Tito (Gabriel y Vencerás), y las voces del propio Señalada y de Laura (Doble Pletina). Para seguir teniendo espacio, una de las cosas más escasas en los discos de hoy en día, únicamente añadí percusiones de bongos, pandereta y cabassa. También grabé un rhodes que entraba y salía, como si de otro coro se tratase, y jugué con mutear y desmutear el bajo de Tito. Ya está. Con una melodía tan redonda, bonita y luminosa como la que Señalada había hecho, ¿para qué taparla con más cosas?

Gabriel y Vencerás

[Marino]

(Entrada de junio de 2016) El nuevo disco de Gabriel y Vencerás, llamado Juegos Mediterráneos, se grabó en dos tandas en 2015. La primera de ellas fue la grabación de las baterías acústicas y algunos bajos en el estudio de Cristian Palleja (Barcelona), y la segunda fue una semana en agosto en mi estudio de Madrid, donde grabamos todo lo demás (más bajos, teclados, guitarras eléctricas y acústicas, programaciones, voces y coros). El disco estaba semi-producido, en el sentido de que la mitad de las canciones ya estaban formadas y la otra mitad no, así que fue un proceso bastante variado y divertido. Juegos Mediterráneos contiene influencias desde The Sea & Cake, Pavement o El Niño Gusano hasta cosas como Beach House o Spandau Ballet. La premisa fue "que suene fresquito". Marino, que inicialmente se iba a llamar Meconio, es el sonido del frescor según Gabriel y Vencerás: eléctricas con el Boss PH-1r, un piano ebrio y los coros de Pedro jugando con el bajo de Tito. Quizá mi canción favorita del disco. ¡Disfuten!

Roger Sincero & Javier de Torres

[Was Your Tie Black?]

(Entrada de enero de 2016) Roger Sincero y Javier de Torres son dos veteranos compositores con amplias carreras por separado, pero también con dos discos publicados como dúo. En sus discos como dúo es habitual la presencia de colaboraciones estelares, y en concreto tienen especial debilidad por las voces femeninas. Para su próximo y tercer disco en este formato, han decidido dar un paso adelante con este modus operandi y crear un LP enteramente pensado para ser cantado por chicas, en la estela de clásicos como Lee Hazlewood o Spector. 

Contactaron conmigo para hacer en el estudio la maquetación de 17 (que se dice pronto) canciones en un fin de semana. Me pareció una locura, así que dije que sí. Para la maquetación contaron con la voz de Martina Gil, y el resto de instrumentos los tocaron Roger y Javier en tiempo récord, con algún overdub por mi parte en canciones concretas, como esta "Was Your Tie Black?" que podéis escuchar más abajo.

Aunque más tarde las canciones evolucionarán de múltiples maneras, en la maquetación los instrumentos han sido muy contados, y el ambiente para las mezclas cercano al mundo de las Carole King y Laura Nyro más íntimas: pianos, acústicas y mucho espacio en una voz cálida y deliberadamente ecualizada para tener menos brillo que el acostumbrado en muchos discos actuales. 

Alondra Bentley

[What Will You Dream]

(Entrada de octubre de 2015) Alondra Bentley es ya una establecida referencia en la escena nacional, pero lejos de contentarse con una fórmula, con tres discos a sus espaldas se lanzó a probar nuevas sonoridades y viajó a Richmond para que su nuevo disco, Resolutions (Gran Derby Records, 2015), fuese producido por Matthew E. White. Resolutions tiene claros referentes del calado de Kate Bush, Julia Holter o los Fleetwood Mac más pop, y fue grabado en Spacebomb Studios con músicos y colaboradores de Matthew E. White. Mi misión fue mezclar las 10 canciones que componen el LP. What Will You Dream es muy Hounds Of Love, y es una de mis canciones favoritas del disco. En esta canción el máximo desafío fue conseguir una batería lo suficientemente abierta y vibrante partiendo de tan solo tres pistas (bombo, caja y ambiente mono). Entre esas pistas y las de percusión, que para mí eran claves en la canción, conseguí dotar al asunto de cierto grado de tridimensionalidad con algunos panners estéreo y diferentes envíos a distintas reverbs. La voz de Alondra está doblada naturalmente, pero la segunda voz está mucho más abajo en la mezcla para ganar claridad sin perder profundidad. En cualquier caso lo que hace brillar a la canción es, valga la redundancia, la propia canción. Sus cambios de acordes, sus melodías vocales y la sección final, perfectamente arreglada, son brillantes. Pocas veces se habla de las canciones cuando se habla de un disco, pero ésta es la prueba, una vez más, de que son lo más importante.

Podéis escuchar What Will You Dream aquí, y comprar Resolutions aquí.

[Mid September]

(Entrada de octubre de 2015) Como segunda canción de Resolutions en esta sección de la web, la verdad es que no sabía cuál poner. Mid September es el segundo adelanto que ha salido del disco, así que por qué no usarlo aquí también. En Mid September intenté que los toms de la estrofa tuvieran presencia, pero sin que sonaran muy desparramados. La caja también tenía que sonar moderna pero con cuerpo, y por otro lado diferente a la caja de What Will You Dream, que es muy particular. Volviendo a Mid September, es la acústica la que aporta el brillo que aportaría el hihat en la estrofa. El otro instrumento que manda en la canción, en concreto en el estribillo, es el increíble bajo de Cameron Ralston, que procuré automatizar en cada lick. Para mí es una canción importante en la carrera de Alondra Bentley porque tiene una urgencia e incluso una cierta agresividad que no son frecuentes en sus discos anteriores. Pero es que Resolutions es un disco muy muy grande, con una amplitud de miras fascinante. Para mí ha sido un privilegio aportar las mezclas y desde aquí agradezco a Alondra la confianza que ha depositado en mí.

Podéis escuchar Mid September aquí. Resolutions ha sido masterizado por Javier Roldón en Vacuum Mastering. 

Ana Muñoz

[Alejando]

(Entrada de abril de 2015) Con Ana Muñoz hemos grabado un EP de cinco canciones que verá la luz a lo largo de este año. Comenzamos en noviembre de 2014, deconstruyendo y reconstruyendo las canciones que me envió, componiendo partes nuevas y alterando las que ya había. Ana tiene un gusto extraordinario, y en el EP se pueden escuchar ecos de de Midlake, Linda Perhacs y Beach House. En esta grabación he usado extensivamente micros de cinta, sobre todo en voces pero también en eléctricas y acústicas. Alejando, de la que de momento sólo puedo poner un extracto instrumental, tiene algunos teclados pero casi todos los colchones son eléctricas a través del EHX Memory Man, el Quadraverb y algo de software. La estrofa y el pre-estribillo están jugando a crear tensión para después soltarla, y es en el estribillo donde todo eso se resuelve de forma más o menos grandiosa pero a la vez pacífica, aunque tendréis que esperar a que se publique el EP para entender algo de lo que digo : )

Calavera

[Campo a Través]

(Entrada de abril de 2015) Calavera son un grupo. Un grupo de verdad. Cuatro personas que reman en la misma dirección y que están constantemente pensando en su música y en cómo hacer que sea todavía mejor. Trabajar con ellos ha sido un regalo del cielo. Después de un concierto en Madrid en otoño de 2014, acordamos que sería su productor para el siguiente EP de la banda, El Monte del Perdón. Entre diciembre y enero hicimos varias sesiones de preproducción en Zaragoza y Madrid, incluyendo la grabación en mi estudio de todos los teclados del EP, y seguidamente fuimos a Montreal Studios en Subiza a grabar el resto de cosas allí con Hans Krüger. Ha sido una suerte también conocer a Hans, un gran profesional y un tipo majísimo. Durante el día Hans se ocupó de las grabaciones y mezclas, y durante las noches me ocupé yo. Las jornadas fueron maratonianas, pero el resultado ha sido un EP que emociona y conmueve, y estamos verdaderamente orgullosos. Campo a Través es el segundo corte, que incluyo aquí en su versión definitiva (masterizada por Javier Roldón en Vacuum Mastering). 

El Monte del Perdón en Spotify, aquí. 

Tripulante y Crucero

[Las Hogueras]

(Entrada de abril de 2015) El segundo disco de Tripulante y Crucero, Los Pueblos, se grabó en tres estudios distintos en 2014. Las baterías, metales, muchos bajos y alguna eléctrica se grabaron en Audiomatic y Studio B, y el resto de instrumentos se grabaron en mi estudio. Después mezclé todo también en mi estudio y enviamos las mezclas a Vacuum Mastering en Zaragoza para el máster final, del que he extraído dos canciones. Una de ellas es Las Hogueras, de la que me parece especialmente interesante su base rítmica. Hay una fusión de maracas y otros elementos de percusión (grabados con el KSM141 y el M160) junto a una pista de bajo que alterna entre un bajo eléctrico y un sinte, en función del momento en la canción. La caja está muy tratada, con un envío a un armonizador estéreo y otras cosas, y en general la batería se orientó hacia un sonido poderoso. La eléctrica del riff está pasada a través de un secuenciador de la casa Sugar Bytes. Mi momento favorito de la canción, sin embargo, es la entrada del arpegiador en el estribillo. 

[Samba de Carnaval]

(Entrada de abril de 2015) Tripulante y Crucero es un grupo fácil y difícil al mismo tiempo. Fácil porque sus canciones son luminosas, bonitas y cotidianas, y difícil porque lo luminoso y lo cotidiano es a veces confundido con lo ligero y superficial por bastante gente. (Gente que suele ser ligera y superficial, por cierto, pero ése ya es otro debate). Samba de Carnaval es una de las canciones de amor más luminosas, bonitas y cotidianas que he escuchado en tiempos. Una bossa nova en toda regla (nada de samba) en la que quisimos que ningún instrumento destacara por sí mismo, dejando todo el peso a las voces de Javier Peña y Clara Collantes (Sierra, La Ruleta China). Parece que no, pero es una de las canciones del disco con más pistas grabadas, incluyendo congas, shakers, maracas, vasos, coros, mellotrones, nylon, piano, eléctrica y multitud de trackings de batería. Sin embargo el sonido es reposado y amable. Se recomienda escuchar nada más llegar del trabajo, bebida helada mediante.